El tiempo como raudal de agua se lleva muchas cosas,
y cuando has empezado a contarlas una a una,
repentinamente, ya no estuvieron desde ayer.

-> Quien pudiera

Quién pudiera estar aquí, hacer recordar a la vida
el valor de las sonrisas, el valor de las sombras en las veredas
de los pies que no se quedan , en las manos laboriosas,
quién pudiera con una sonrisa resumir el mar y el cielo,
sin olvidar el cáos detrás ni la hiel de las cosas,
quién pudiera decirme esa palabra exacta a las horas,
a las horas más alejadas de todos,
balbucear como niño los nombres y guardar eternidades en los ojos...

quién pudiera ser tan simple en sus manos
quién pudiera ser tan sólo descanso de unos labios
y sombrilla de las lágrimas, de repente lágrima misma, no importa...

quién pudiera en la pequeñez de las cosas hallar
el universo complejo, inentendible y escurridizo
de la inercia de estar al lado...

quién pudiera en el ocaso cotidiano
besar el árbol más cercano
con la intención más pura del cariño...?

-> Antes de dormir...

miro alrededor por si no olvido alguna cosa que me pueda llevar,
antes de que venga mi barco deforme, desde ningun mundo cercano,
color oscuridad reluciente y convertido en aurora,
y a pesar del desorden de mi cuarto, cartas sin leer,
todo en el exacto orden y caos al cual mañana he de volver...

pero solo antes, tal vez, no lo niego, quizá piense
en alguien que antes me quería,
o en alguien que pudiera echarme de menos,
y aunque soy solo yo, en realidad, soy muchos brazos friolentos...

entonces, solo entonces, justo en ese momento
en cuestión de pocos minutos, se lo digo , nosé
tal vez me lo digo a mi, o al aire o al tiempo, nosé

conjugo en presente el verbo querer,
y aunque creo que sobra, estando con nadie más,
en baja voz con sabor a soledad..

susurrante y tímido a la vida,
le digo cansado: te quiero....